Historia de la Flor de Pascua
Esta planta mágica es originaria de México. Crecen en las chinampas, es decir, en los jardines de las ciudades aztecas. Pronto la población se percató de la fuerza y propiedades de la flor de pascua. Este conocimiento llegó rápidamente a España. Por ello, los españoles de la era de Hernán Cortes, viajaron a la capital de México en 1520 para ver en personas estas plantas de colores varios que crecían en los jardines del rey azteca, Moctezuma. En su regreso a España, trajeron consigo semillas de esta planta mágica para comenzar a cultivarla en nuestro país.
Sin embargo, pasados los años, los españoles dejaron de darle la importancia que se merecían a estas plantas mágicas. Pero en el año 1825, el embajador de Estados Unidos de aquel entonces, Joel Robert Poinssett puso toda su atención en la flor de pascua. Quedó maravillado con su belleza y se la llevó a California. Comenzó a cultivar esta planta con mucha dedicación porque sentía que era mucho más que una planta bella. Acudió a varios investigadores una vez tuvo un gran jardín de flores de pascua. Tras varios meses analizando el comportamiento de la flor de pascua, se dieron cuenta de que poseía propiedades mágicas.
Propiedades de la Flor de Pascua
La parte de la flor de pascua que posee mayor magia son las flores o frutos. Se encuentran en el interior de la planta y son de color verde. Es la zona que está en contacto directo con la raíz, lo que provoca que sea la parte que más energía absorbe a través del suelo.
La flor de pascua transmite buenas vibraciones. Solo atrapa las energías que considera positivas, tanto para enriquecerse ella misma como para transmitir esta positividad y energía a las personas que hacen uso de la flor de pascua.
Por otro lado, la flor de pascua se utiliza gracias a su vinculación con la vida interior del ser humano. Tiene la capacidad de transmitir tranquilidad, asosiego y serenidad en aquellas situaciones de tensión o estrés. Estas propiedades las transmite gracias al impulso de la fuerza mental.
Otra de las propiedades de la flor de pascua es la buena suerte. Ya hemos dicho que son utilizadas en Navidad porque ayudan a comenzar el año nuevo con la mejor de las suertes y con la confianza y esperanza necesarias para cumplir lo que nos proponemos. La buena suerte también es consecuencia de la eliminación de las malas energías que realiza esta planta mágica.
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