Beneficios del Tilo
El tilo es un árbol con grandes propiedades médicas. Se usa para los nervios, los dolores de cabeza o los vómitos. De él nace la tila que es un poderoso sedante que ayuda a calmar los nervios y a eliminar las sensaciones de malestar. La tila también ayuda a recuperar los resfriados, los catarros o la gripe. Para ello es necesario tomar varias infusiones al día. En caso de tener asma, es recomendable crear infusiones de tilo, manzanilla y detoronjil a partes iguales.
Lo mismo ocurre con los cólicos o los desórdenes menstruales. La tila es una gran aliada para aliviar los síntomas. Sus infusiones son mano de santo. Para el reuma, es habitual hacer cataplasmas con hojas y flores de tilo trituradas y aplicarlo sobre las zonas afectadas.
Las hojas de tilo se usan en infusiones para conseguir una mejor salud. Además, estas infusiones se pueden utilizar en los baños para calmar el dolor de pies y el cansancio.
Pero el verdadero poder del tilo se encuentra en el terreno esotérico. Estas propiedades son obtenidas igualmente a través de los rituales. La fuerza del tilo y de la espiritualidad hace que se cree una conexión única y mágica que permite aportar salud al cuerpo.
Aspecto espiritual y rituales con Tilo
Las personas nacidas entre el 11 y 20 de marzo y entre el 13 y 22 de septiembre están marcadas con las propiedades del Tilo. Son personas con una gran personalidad, que no les gusta las discusiones e intentan evitarlas, inteligentes y con gran optimismo. Para estas personas la fuerza el tilo es todavía más poderosa, por lo que son idóneas para realizar rituales con ellas.
El tilo es utilizado en el campo esotérico para evitar disputas o evitar situaciones desagradables, para potenciar un aspecto de la personalidad, para aprender a ser más positivos, para sentirnos sanos y energéticos y para conseguir dominar nuestra propia vida. La espiritualidad de la Luna es idónea para los rituales con tilo, por lo que es recomendable hacerlos siempre por la noche cuando ha caído el sol.
Un ritual con Tilo muy frecuente es para beneficiarse de todas sus propiedades medicinales. En este caso no es necesario tomarse ninguna infusión pero sí crearlas. Para ello cogeremos un trozo de corteza de Tilo, preferentemente un trozo que este expuesto al sol durante varias horas. Quemaremos ese trozo para que entre calor y se exploten todas sus propiedades internas. Posteriormente lo introduciremos en un vaso de agua caliente y lo dejaremos reposar. A la noche siguiente, empaparemos un paño o pañuelo con esa agua y nos lo colocaremos encima del cuerpo, sobre la zona que queremos tratar. Seguiremos este procedimiento durante una semana. Notaremos mejoras a corto plazo.
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