Existe una gran cantidad de habilidades mágicas entre las que se encuentra la telepatía. Se trata de un fenómeno que consiste en la transmisión de pensamientos entre personas que, por lo general, se encuentran a cierta distancia. Este contacto se produce sin intervención de los sentidos o de cualquier objeto. Es decir, la persona que puede realizar la telepatía, se comunica a través de la mente con otros seres humanos o animales, sin utilizar el habla. Se trata de una acción extrasensorial. La telepatía depende totalmente de la mente y sus poderes potenciales. No todas las personas son capaces de alcanzar la habilidad de la telepatía. Solo aquellas personas más sensitivas y con la mente desarrollada, son capaces de llegar a este nivel, no sin antes practicar durante mucho tiempo.
Historia de la Telepatía
Se entiende que la telepatía existe desde que existe la humanidad, pero no se pueden encontrar escritos oficiales que aseguren su verdadero origen. También es cierto que ya en la Biblia se muestra una y otra vez la voz de Yahvé que habla dentro de sus siervos. Para conocer ciertas cosas sobre la historia, será necesario acercarnos a una época mucho más contemporánea. Sobre 1883, W.H. Meyers empezó a utilizar el término telepatía. Fue la primera habilidad mágica que fue estudiada científicamente. Aunque es cierto que fue a partir de este momento cuando se empezó a saber más sobre esta habilidad. En 1886, la Sociedad de Investigación Psíquica de Inglaterra, gracias a su fundador Meyers, utilizó el nombre de “telepatía” para nombrar la transferencia del pensamiento. En 1917, de la mano del psicólogo John Coover, encontramos diversos experimentos sobre la telepatía. En la primera publicación de Extrasensory Perception (1934), J.B. Rhine considera la telpatía y la videncia como experimentalmente demostradas, garantizando en sus experimentos, la eliminación de todas las fuentes de error. Dentro de la óptica esotérica, la telepatía está muy vinculada al funcionamiento de los chakras.
En qué Consiste la Telepatía
Según los más expertos dentro del estudio de la telepatía, está demostrado que, cada vez que una persona tiene un deseo, está rememorando o programando una idea, nuestro cerebro se pone a emitir ondas cerebrales continuas. Los expertos aseguran que estas ondas pueden ser captadas a través de tres medios diferentes: El contagio onírico, la clarividencia y la telepatía.
El contagio onírico se da cuando soñamos y nuestra vivencia orínica es una percepción telepática de lo que otros han pensado. La clarividencia permite a las personas más sensitivas captar nuestras ondas y con ello nuestras ideas y pensamientos. La telepatía, en cambio, sería la emisión y recepción de pensamientos. Para que se pueda dar la telepatía como tal es necesario un emisor, un receptor y, obviamente, un mensaje.
Expertos esotéricos aseguran que esta habilidad puede canalizarse a través del ojo de la mente. Por lo general, las personas que reciben este don pueden oír pensamientos y proyecta sus propios pensamientos. También pueden proyectarlos mientras están leyendo la mente de otra persona. Hay que tener claro que no todo el mundo consigue desarrollar la telepatía. Su manifestación siempre dependerá de la persona.
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